Por: Isabel
Capitulo 14
“Así que finalmente te lo dijo Sora, finalmente tuvo el valor de decirte lo que sentía. Y tu lo vas a aceptar, ¿no es así?. Es por él que actuaste de la manera en que lo hiciste esta mañana”
Sora miró con molestia a Leon mientras este dejaba de aplaudir y los miraba con sus fríos ojos.
“Leon, ¿por qué mejor no te buscas alguien mas a quien molestar?”
Sora miro sorprendida a Ken al oírlo hablar de esa manera a Leon, pero al mismo tiempo salto de alegría. Aun podía sentir sus labios. El cálido aliento de Ken y el recuerdo de su declaración era como pintura fresca que no deseaba secarse... Ken la quería, ¡la quería a ella!. Y su corazón iba a explotar de la alegría.
“No me iré hasta que Sora sepa toda la verdad, ¿Sora ya sabe todo lo que tu y su amiguita Guillem planearon a sus espaldas?”
Al escuchar a Leon decir todo eso, Sora se sintió un tanto recelosa pero no dijo nada. Leon no era la mejor persona del mundo y ella lo sabía, ahora ella sabia que después de todo él no había cambiado.
“Veo que no le has dicho todo Robbins. Bien Sora, pues no se cual es la verdad contorsionada que aquí nuestro querido amigo te dijo; pero la versión real es la siguiente: Él y Guillem confabularon en tu contra para que tuvieras celos, te hicieron creer que eran novios y se reían a tus espaldas mientras tu sufrías de la incertidumbre... mientras te dabas cuenta de que sucedía en realidad aquí”
Leon se señalo el corazón con una mueca muy parecida a la de la melancolía y mientras Ken se acercaba a él de manera desafiante inquirió.
“¿Acaso pensaste que todo esto tu sola lo sentías Sora?. No querida, ellos lo crearon... siento decirte que has caído en el sucio juego de Robbins y Guillem”
“¡No es cierto!” Grito Ken al estar frente a Leon. “¿Acaso ya olvidaste lo que sucedió en la graduación después que dejaste a Sora en su casa?, ¿acaso esa noche en tan poco tiempo se te borro de la memoria el amor que dices sentir por Sora mientras que estabas con May Wong?. No me digas que hay juegos sucios cuando los peores los cometes tu Oswald”
Sora no sabía que hacer o que decir, ahí estaban frente a ella aquellos dos hombres gritando como locos y dejando ver todo lo que en realidad sucedía. Ken le había mentido, Mia la había engañado... Leon se había burlado de nuevo de ella.
Se sintió tan estúpida por creer que las cosas en aquella noche podrían ser diferentes, por creer en un momento que lo que Ken decía era verdad, por darse cuenta de que después de todo Mia no era su amiga; por que justo después de besarle fuera de su casa Leon había buscado a May y después había fingido un amor que no existía.
“¿Qué demonios sucede aquí?”
La repentina aparición de una voz ajena a la de los dos jóvenes que se gritaban cualquier clase de ofensa a toda voz de pronto causo un silencio sepulcral. Mia se acercaba con cara de susto y a la vez molesta.
“¿Qué te parece que sucede Guillem?. Le eh contado toda la verdad a Sora”
Leon se inflo orgulloso de lo que acababa de decir, pero aquella afable y orgullosa sonrisa que tenia en la cara se congelo al ver acercarse a ellos con rapidez a una furiosa May.
“Se oyen tus gritos hasta el otro lado del campamento Leon. Exijo una explicación” Y mientras miraba a una consternada Sora agrego “Ahora mismo”
“No hay nada que explicar May, es todo un malentendido que---”
“¡No es ningún maldito malentendido!” vocifero Ken.
“¡¿Así que no es mentira lo que ha dicho, Ken?!, ¿Cómo es posible que hayan lo hayan hecho?. Yo confiaba en ustedes, en ti… pero de quien no me lo esperaba era de ti Mia. ¡No puedo creerlo!. Gracias amiga”
“Sora, déjame explicarte. No se que te dijo Leon pero--”
“¡Cállate!, no quiero oírles decir ninguna otra cosa mas. ¿Me oyeron?. Estoy harta de esto y de tener que vivir como una estúpida frente a todos ustedes. Tu Leon, buscaste mi confianza e incluso te atreviste a decirme que me amabas cuando aun te veías con May y lo que mas me duele es que en algún momento llegue a creerte. Soy una estúpida, estúpida, estúpida” Grito con coraje mientras caminaba de un lado al otro intentando calmarse.
“¿De que esta hablando Leon?” Grito May furiosa mientras se acercaba furibunda a él “¡Respóndeme!”
“Y ustedes dos, me dan asco… no quiero volver a verlos” Menciono Sora mientras señalaba aun mas furiosa a Ken y Mia.
Ante el inminente silencio que vino después de sus palabras agrego señalándolos a todos de manera intercalada.
“¡A ninguno de ustedes!”
Sintió las lagrimas agolparse en sus ojos, le habían mentido todos y cada uno de ellos... y ella era la única tonta que no se daba cuenta de las cosas. La única que había sido engañada, sintió que le faltaban fuerzas y que si se quedaba ahí por más tiempo se derrumbaría. Así que sin tomar en cuenta mas nada corrió aventando a Mia en el trayecto.
“¡Espera Sora!”
Sintió la mano de Ken tomar la suya mientras regresaba al campamento, pero sin responder la retiro angustiada y molesta, quería irse lejos de ahí... no quería verlos, ni enfrentarlos. A partir de ese momento para ella; Ken, Mia y Leon no existían.
No existían.
-...-
Hacia tres semanas desde lo sucedido en el campamento y Sora evitaba a toda costa a Mia y Ken. Pero Ken parecía no cansarse, todos los días la iba a buscar y se quedaba todo el día fuera esperando poder hablar con ella. Pero ella solo le observaba desde la ventana deseando que se fuera y al mismo tiempo bajar con él.
Durante esas semanas había estado reflexionando acerca de lo que había sucedido y aunque aun se sentía herida, Mia le había dejado una carta con su madre donde le explicaba todo y que sobre todo la idea del plan había sido de ella y que Ken solo había decidido participar ante su insistencia, que si tenia que odiar a alguien era a ella... y que aun así, nunca fue su intención herirla.
Pero su orgullo podía más en aquel momento, no quería admitir que después de todo estaba mal y debía darle la oportunidad a Ken, incluso su mamá había estado intentando hacerla entrar en razón.
“Hija, por favor baja. Tiene semanas intentando hablar contigo, por favor no seas orgullosa... ese chico realmente te quiere”
Su mama la miró una vez mas esperanzada mientras cerraba la puerta de su habitación con fuerza, el sol comenzaba a ocultarse indicando que el día llegaba a su fin y comenzaba la noche. Se asomo una vez mas por la ventana y pudo ver a Ken caminar del patio de su casa hacia la banqueta.
Ya se iba... un impulso repentino la hizo reaccionar, en una semana mas ella se iría fuera de ahí a estudiar su carrera. Al final había decidido huir... tal vez solo por una ultima ocasión debía hablar con él. Corrió escaleras abajo y cuando llego a la puerta se detuvo al verlo caminar con rapidez.
“¡Espera Ken!”
Él se detuvo y la miró por un segundo antes de acercarse con rapidez hacia ella... y por la sonrisa que él le brindó, supo que esa seria la ultima vez que le vería.
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