domingo, 23 de diciembre de 2007

A Ti - Capitulo 8

Capitulo 8
La verdad absoluta

Sakura observaba con atención cada movimiento por parte de Shaoran. Hacia unos diez minutos que Tomoyo y Eriol se habían excusado y les habían dejado solos en la sala de la casa de los mismos.

Desde que Shaoran había pronunciado aquellas ultimas palabras en las que se refería al suceso de hacia diez años lo había notado un tanto ansioso y nervioso, por su parte, Sakura no estaba segura de que era lo que sentía en ese momento… solo esperaba sentada sin decir nada.

“Creo que debería comenzar”

Repentinamente Shaoran dejo de moverse y la miro con detenimiento mientras tomaba asiento justo frente a ella e intento sonreír fallando en el intento.

“¿Hay algo en particular que me quieras preguntar?”

Sakura intensifico su mirada y frunció el seño un tanto impaciente.

“Supongo que eso es un no”

“Shaoran por favor empieza a hablar antes de que mi terrible temperamento salga a flote una vez mas”

Shaoran pareció sorprendido de oírla hablar con tanta serenidad y convicción y asintió dos veces con la cabeza antes de tomar una bocanada de aire.

“Esta bien… Sakura, la verdad es que todo lo malinterpretaste hace diez años”

Calló de manera repentina esperando una replica por parte de ella pero al no encontrar nada prosiguió.

“Bueno, no lo malinterpretaste tu. Mas bien eso fue lo que te quisieron hacer creer, estoy seguro de que recuerdas perfectamente a Verónica y yo jamás te lo dije pero cuando tu y yo empezamos a ser novios ella constantemente me llamaba o visitaba a mi casa cuando tu no estabas, cosas así; yo jamás te lo dije por que pensé que no tenia importancia, además a mi ella no me interesaba… sin embargo, después de que te fuiste descubrí muchas cosas”

Una vez más Shaoran hizo una pausa intentando saber si Sakura tenía alguna objeción o comentario pero ella seguía tan callada e indescifrable que creyó conveniente proseguir.

“Al principio no entendí que había sucedido aparte del hecho de que estabas enojada conmigo y me odiabas como a nadie pero cuando te fuiste y no pude detenerte supe que había cometido un gran error al no buscarte y suplicarte que me perdonaras aun si yo no había hecho nada. Ahora que lo pienso todo esto suena de lo mas tonto pero la verdad es que en aquel momento sentí que fui un estúpido al no hacer nada de eso, meses después, supe que quien había planeado todo había sido Verónica con la ayuda de varios de los chicos del equipo de básquetbol, tu sabes que ellos no te querían mucho por que creían que me estabas cambiando cuando no era así, yo confiaba en ellos y les había contado acerca de nuestra noche especial y junto con Verónica planearon la manera de separarnos, ellos ahora están muy apenados por todo en especial Verónica que entiende que fue demasiado infantil espero puedas perdonarlos pero sobre todo espero…”

“No esperes nada Shaoran, es absurdo todo esto”

Al principio aquellas palabras resonaron como eco en la cabeza de Shaoran mientras observaba a Sakura ponerse de pie y caminar rumbo a la puerta de la casa de sus amigos. Por impulso, se puso de pie y camino tan rápido como pudo para alcanzarla y con fuerza la tomo del brazo haciéndola mirarlo a los ojos.

“Sabia que no lo entenderías, sabia que así reaccionarias. No se por que por un momento al mirarte hace un rato pensé que realmente podrías entender que todo lo que sucedió fue una jugarreta en la que ambos salimos perdimos y que por sobre todo me perdonarías”

“No tengo nada que entender y mucho menos que perdonarte Shaoran. Ahora por favor suéltame que es tarde y quiero irme a casa”

“Yo te llevo a tu casa”

Soltándose de su agarre Sakura inquirió un esta bien y camino con rapidez hasta alcanzar la puerta y salir con rapidez. No le quedo más que apresurar el paso y alcanzarla con prontitud.

-…-

Sakura se miraba en el espejo de su habitación como inspeccionando algún cambio, pero sabia que al menos físicamente no lo había. ¿Qué demonios había sido todo aquello?. Ahora que lo analizaba todo, no era tan absurdo como al principio parecía haber sido ni tan grave, tal vez fuera que el oír a Shaoran decirle que él no había planeado nada le había hecho sentir un alivio en el corazón y aquella grieta que hace mucho se creo cerro… pero sabia que solo había sido en una pequeña porción.

Ahora lo único que se podía preguntar, era por que hasta ahora había esperado Shaoran para decirle todo eso, en el por que no le había ido a buscar… estaba mas que segura de que él se llevaba con Tomoyo y su familia lo suficiente desde su partida como para saber en donde estaba ella, con quien, que hacia y que no hacia. Lo sentía, ellos le habían dicho todo pero… ¿Por qué no había ido por ella? y ¿por que no se lo había podido preguntar?.

Todo el camino hasta su casa había sido sumamente silencioso y el aire le faltaba con cada metro menos hacia su puerta, el silencio de Shaoran era sofocante y demasiado frió. ¿Qué había hecho?, ¿le habría herido?, ¿habría hecho lo correcto al comportarse de aquella forma después de que él le había contado todo?.

No sabia que pensar… no sabia que hacer. Iba a explotar por dentro.

“Necesitas dormir, mañana todo estará bien”

-…-

Mientras tanto, Shaoran estaba mas que decepcionado. Se sentía como el tonto mas grande de la historia, realmente por un momento había pensado en el hecho de que finalmente contarle la verdad a Sakura ayudaría para poder resolver todo y a que finalmente estuviesen juntos como siempre debió ser. Ahora sabia que todo aquello había sido tan solo una de sus tontas ideas.

Lo que mas le afectaba era el hecho de saber que en unos días mas, estaría pasando demasiado tiempo junto a ella por la boda y no sabia si podría controlarse durante mucho tiempo. A pesar de todo deseaba tomarla entre sus brazos y decirle que le amaba, que le habia extrañado y que le perdonara por todo lo que alguna vez sufrió. Pero muy en el fondo, sabia que tan vez eso no seria suficiente para ella. Sakura realmente era una hueso duro de roer.

Mirando el techo de su habitación con insistencia, cerro los ojos intentando conciliar el sueño. Esperando que el siguiente día fuese mejor que aquel que acababa de pasar.

-…-

El sonido de unos nudillos tocando a su puerta la hicieron abrir los ojos levemente. ¿Quién seria?. Cerró los ojos frustrada intentando dejar de sentir los rayos del sol sobre su cara y escucho el sonido de la puerta abrirse y cerrarse poco después. Solo una persona se atrevía a hacer eso sabiendo las consecuencias de aquello, y ese alguien era nada mas y nada menos que Touya Kinomoto.

“¿Qué quieres Touya?”

“Sakura, necesito hablar seriamente contigo. No me importa que tanto me odies ni que tanto digas que jamás me lo perdonaras pero necesito hablar contigo seriamente antes de casarme para sentir que me iré a hacer mi vida con la mujer que amo habiendo dejado en orden todo con mi familia antes”

Que Touya le llamase Sakura, no era una evento que sucediera todo los días así que se deicidio a ponerle un poco de atención a pesar de que había interrumpido su sueño.

“Touya, no te iras tan lejos. Seguirás viviendo aquí en la misma ciudad que mis papas”

“Lo se Sakura pero de todas formas quiero hacer esto. Sobre todo por que se que tienes mas que planeado regresar a Nueva York y no se cuando podré volver a verte”

“Tonto, te prometo que vendré mas seguido”

“Espero que mantengas esa promesa”

“Lo haré, ahora dime. ¿Qué es eso tan importante que quieres decirme?”

“Bien, se que no debería inmiscuirme por que son asuntos entre tu y Shaoran pero hermana, deberías dejar atrás el pasado por el bien de ambos. Yo se que él aun te ama, nunca ha dejado de hacerlo; tu me conoces y sabes que no suelo confiar fácilmente en la gente y menos en alguien que desee robarme parte de lo mas preciado en mi vida que eres tu pero estoy seguro de que Shaoran jamás buscaría hacerte daño y si hay alguien en quien confiaría para cuidarte seria en él. No se que sucedió con lujo de detalles pero si se que les jugaron chueco hace muchos años a ambos, todos en el pueblo lo saben y se sienten culpables de alguna manera por lo pasado pero quiero que lo pienses y recapacites si aun en tu corazón queda algo de ese amor que se alguna vez existió por él”

Sin dejarle decir una sola palabra, Sakura observo a su hermano darle un beso en la frente antes de salir por la puerta de su habitación. Y después, solo se dejo caer en la cama pensando en todo lo sucedido desde la noche anterior.

-…-

“Lo escuchamos todo Shaoran. Tomoyo y yo sentimos mucho que Sakura haya reaccionado de esa forma. En el fondo ella y yo esperábamos que se reconciliaran en ese momento y todo fuera de maravilla”

Eriol observo con detenimiento a Shaoran por centésima ves de lo que iba en el día mientras esperaba alguna respuesta a aquel comentario que finalmente había decidido hacer respecto a lo sucedido la noche anterior pero tal y a como su saludo de buenos dias, ninguna respuesta salio de los labios de su amigo. Se le notaba definitivamente mal.

“Shaoran, tienes que hablar y desahogarte. Quedarte aquí estático como una piedra no te ayudara en nada. Tomoyo ya tiene todo un argumento preparado para darle hoy a Sakura en caso de verle, dice que intentara sacar información vital al respecto para ayudarte. Es la primera vez que la veo decidida a inmiscuirse en esto”

“Dile que no lo haga”

Eriol impactado se quedo callado por un momento mientras miraba fijamente a Shaoran quien también le miraba fijamente.

“Pero Shaoran…”

“Por favor Eriol, dile que no lo haga. No es necesario, Sakura me dejo en claro lo que siente con su actitud ayer así que no pienso mover mas todo este asunto”

“Se lo diré Shaoran, pero no precisamente eso significa que ella no lo hará. Como tu también ella quiere respuestas”

Sin decir mas nada Eriol se retiro del despacho de Shaoran sumamente preocupado por él. Era más que definitivo que esta vez lo de Sakura le había afectado a grandes proporciones. En el fondo, él deseaba que todo se resolviera, pero ahora dadas las circunstancias no se sentía muy seguro al respecto.

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sábado, 22 de diciembre de 2007

All I Want For Christmas, ONE-SHOT

Sora observaba en silencio la nieve caer mientras oía risas a su alrededor. Todos sus amigos estaban plenamente felices y disfrutaban de las festividades, pero ella solo esperaba con ansias poder ver a una sola persona entrar por la puerta.

I don’t want a lot for Christmas there is just one thing I need
I don’t care about the presents underneath the Christmas tree

“Sora, deja por un momento de ver a la ventana y ven a divertirte con tus amigos” Anna la tomo del brazo y la jalo hacia la ola de gente reunida en la sala de su casa y que brindaba con el champagne a coro.

Cuando el quinto salud que Sora presenciaba se hizo presente en el lugar el timbre sonó y la primera en ir a responder ante aquel llamado fue ella, sus ojos denotando su emoción al imaginarse de quien se trataba.

I just want you for my own more than you could ever know
Make my wish come true all I want for Christmas is you

“¡Al fin!” grito abriendo la puerta con una sonrisa, pero esta se vio congelada al ver frente a ella a May y su pareja.

“Si ya se que se me hizo un poco tarde, pero nunca creí que te daría tanta alegría mi llegada” Inquirió un tanto con sorna May, ella solo sonrió apenada y los hizo pasar a la sala donde se encontraban todos los demás.

I don’t want a lot for Christmas there is just one thing I need
I don’t care about the presents underneath the Christmas tree
I don’t need to hang my stocking there upon the fireplace
Santa Claus won’t make me happy with a toy on Christmas day

La noche siguió transcurriendo y la cena se hizo presente. Todos devoraron hasta saciar su hambre, en cambio Sora pico un poco la comida con la mirada perdida, esta seria la segunda navidad que pasaría sin él. ¿Cuándo podrían pasar juntos las festividades como la pareja que eran?.

Ella estaba conciente de que desde que no trabajaba en Kaleido y le habían ofrecido proyectos en otras partes del mundo estaba mas ocupado que nunca, pero lo extrañaba, lo extrañaba como nunca pensó extrañaría a alguien.

I just want you for my own more than you could ever know
Make my wish come true all I want for Christmas is you

“No te desanimes Sora, seguro que no tarda en llegar” Ken se sentó a un lado de ella y tomaba un trozo del postre.

“Si, quizás tienes razón” dijo ella sonriendo de la manera mas sincera que pudo y tomando también un trozo de postre mientras dejaba su comida casi completa.

I won’t ask for much this Christmas I won’t even wish for snow
I’m just gonna keep on waiting underneath the mistletoe

Poco después de la cena todos se dirigieron hacia el árbol de navidad a abrir sus regalos, pero Sora ya no estaba de ánimos, eran las doce con cinco minutos y él no aparecía. Seguro que de nueva cuenta le había presentado un imprevisto y no había podido llegar, solo esperaba que él se encontrara bien y que la llamase pronto.

“Sora, ¿no vas a venir?” Preguntaron las chicas cuando la vieron al pie de las escaleras.

I won’t make a list and send it to the North Pole for Saint Nick
I won’t even stay awake to hear those magic reindeer click

“No gracias, creo que me iré a recostar. Tengo sueño”

Sin decir nada todas observaron como ella subía las escaleras y desaparecía ante ellas. Se miraron preocupadas y avanzaron rumbo al salón con el resto de los chicos.

I just want you for my own more than you could ever know
Make my wish come true all I want for Christmas is you, you baby

“No me agrada ver a Sora tan triste, mas le vale a Leon aparecerse pronto por esa puerta o yo misma lo haré papilla” Dijo Anna apretando el puño de manera exagerada causando que las demás rieran. “Ohh vamos chicas, no se rían. Cuando intento ser graciosa no se inmutan siquiera”

“Es que esta vez, debiste haberte visto la cara” Mia la imito mientras intentaba no reír de nueva cuenta y Anna la miro de manera severa. Ese tipo de cosas solo le sucedían a ella.

Arriba Sora estaba recostada en su cama mientras tomaba en sus manos una foto de ella y Leon juntos hacia unos meses atrás cuando el había venido de visita después de un año de ausencia.

Oh, all the lights are shining so brightly everywhere
And the sound of children’s laughter fills the air

Ambos se veían tan felices y él la abrazaba con fuerza a él mientras sonreían a la cámara. De pronto la puerta se abrió y ella sin voltearse respondió.

“Por favor chicas, ahora no estoy de ánimos. Déjenme sola” Pero no encontró respuesta alguna, solo escucho como la puerta se cerraba.

Se sentía sola, pero creía que si miraba aquella foto seguro que él se encontraría con ella, la abrazo con fuerza y musito mientras una lagrima atentaba con escapar de sus ojos.

Everyone is singing I hear those sleigh bells ringing
Santa won’t you bring me the one I really need
Won’t you please bring my baby to me

“Te amo Leon”

Pero lo único que encontró como repuesta fue silencio. Una lagrima recorrió su rostro y ella se sentó mientras dejaba la foto en la mesita y se ponía de pie, iba a bajar; no se iba a quedar mas tiempo en su cama deprimiéndose, seguro que Leon se molestaría con ella si la estuviese viendo en ese momento.

Se puso de pie y al girarse hacia la puerta su rostro se congelo. Alguien estaba en la puerta observándola en silencio. Aquella silueta le era inconfundible.

I don’t want a lot for Christmas this is all I’m asking for
I just wanna see my baby standing right outside my door

“¡Leon!” grito mientras se acercaba y él la recibía en sus brazos.

“Si soy yo pequeña. ¿Cómo pudiste pensar que no vendría?” agrego acariciando su cabello y depositando pequeños besos en su frente, ella solo lo abrazo con fuerza e inhalo su esencia.

Cause I just want you for my own more than you could ever know
Make my wish come true
All I want for Christmas is you and you and you and you and you

“Lo siento, es que te demoraste demasiado” se separo de él y lo miro ofendida “¿Hace cuanto estas aquí?”

Él sonrió y se acerco a ella tomándola de la cintura.

“Eso no importa, ¿por qué mejor no bajamos?; todos nos esperan”

Y sin dejarla responder la beso.

“Te amo Sora Naegino, no lo olvides” agrego al separarse, ella no dijo nada y solo abrió la puerta invitándolo a salir.

Aquella noche seria inolvidable para ella, esa seria su primera navidad a lado de su Leon como pareja. Y estaba segura de que habría más por venir.

All I want for Christmas

Olivia Olson - All I Want For Christmas

All I Want For Christmas

“All I Want For Christmas”

Por: Isabel
Disclaimer: Kaleido Star y todos sus personajes pertenecen a Junichi Sato
Clasificación: A
Sumario: Sora lo espera ansiosa en navidad.
Capitulos:

o1. ONE-SHOT


A/N: Un fic dedicado a la navidad que escribi hace mucho pero que finalmente sale a la luz, sencillo pero a mi parecer significativo. Espero sea de su agrado. ¡FELICES FIESTAS!

jueves, 13 de septiembre de 2007

Dudas

“Dudas”

Por:
Isabel

Dudas, incertidumbre, la vida sin rumbo fijo, mi vida sin ti
¿qué puedo hacer si no se lo que siento y lo que pasa?

Quiero saber que pasa por tu mente, leerla, adentrarme en ti
Y conocer hasta el ultimo vestigio de tu ser
Pero siento que no lo permites
La barrera es muchas veces impenetrable, inaccesible

Y mientras tanto yo desespero, en este camino lleno de niebla espesa
Que no me deja ver lo que hay detrás, lo que hay mas allá
¿Es acaso amor?, ¿o tan solo simpatía?.

Quisiera poder leer en ti, para finalmente salir de aquí
Y no volver jamás.

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martes, 31 de julio de 2007

Incertidumbre

“Incertidumbre”

Por: Isabel


Incertidumbre que matas y asfixias a quien la padece
¿Por qué estas aquí y que quieres?
Si lo que quieres es matarme solo hazlo, que aquí espero.
Si lo que quieres es darme una lección hazlo, que tal vez la merezco.
Pero por favor hazlo rápido, rápido y sin dolor.
Sin dolor y sin penurias.
Sin la oscuridad.
Sin las lágrimas.
Sin tu maldito hábito de hacerme esperar.
No me hagas esperar.
Y vete ya.

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Poesias

Por: Isabel
Aquí esta la lista de poesías que he escrito y subido a este portal.:

Sin Ti

“Sin Ti”
Por: Isabel

Hoy fue un nuevo día para mi,
Un nuevo día en el que descubrí que la vida no es tan amarga
y que no necesito de tu amor para sobrevivir.

Un día en el que al abrir los ojos no me encontré con el cielo nublado
Sino con el resplandeciente sol sonriendo a cada respiración que daba,
Con las mariposas volando a mi alrededor
y el dulce olor de las flores guiándome hacia una vida mejor.

Hacia una vida en la que tal vez no te tenga a ti,
En la que no pueda verte, besarte ni hablarte;
Pero una vida en la que se que saldré adelante,
Dejando atrás todos los fantasmas que significas tu.

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lunes, 30 de julio de 2007

Step in the Name of Love - Epilogo

Por: Isabel

Epilogo

“Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños pequeño Logan. ¡Feliz cumpleaños a ti!”

Los aplausos no se hicieron esperar después del canto. Había pasado un año desde aquel absurdo acontecimiento de su separación, ahora Logan cumplía un año y al parecer era una buena excusa para juntar a sus familias aquel 25 de Diciembre.

Mientras Isabela limpiaba el merengue del rostro de Logan todos los presentes se dirigieron a la sala para abrir sus regalos, era cierto que todos tenían regalos pero había un niño en particular que abarcaba casi toda la sala con sus regalos. Y ese era Logan Feehily.

“Antes de que abran sus regalos” pronuncio Pierre poniéndose de pie y dejando a todos a mitad del acto.

“Deja ahí Logan” inquirió Isabela tomando su pequeña mano que curiosa intentaba agarrar los regalos y alejándola de ellos.

“¡Feliz navidad!”

Mientras alzaba su copa comenzó a reír como si fuera Santa Claus y todos los presentes no pudieron evitar sonreír, después todos volvieron a su labor.

“Izzy, creo que deberíamos retirar la copa de la mano de Pierre” agrego Mark tomándola de la mano.

“Ohh Mark, no empieces esta muy feliz por que al parecer logro superar la crisis con Chris han durado mas de lo esperado”

“Esta bien, tienes razón... pero creo que se le están pasando un poco las copas”

Isabela observo desde aquel lugar a Pierre charlando animadamente con su actual pareja, un rubio de ojos grises, era cierto... las copas se le estaban subiendo un poco a la cabeza pero a ella realmente no le importaba mucho. Sabia que Chris lo cuidaría muy bien... demasiado bien para ser sincera.

“Mejor ocúpate de abrir tus regalos que te tengo una sorpresa”

Mark la miro de soslayo y sin decir mas fue en busca del regalo que estuviera dirigido para él de parte de ella. Y lo encontró.

Forrado en un papel rojo con un enorme moño plateado se encontraba un libro que Mark nunca tuvo la oportunidad de leer.

“Step in the Name of Love”

Al verlo sintió curiosidad por saber acerca de el pero siquiera tuvo que llamarla, ella ya se encontraba a un lado de él y respondiendo a la pregunta que se formulaba en su mente.

“Es el que escribí hace un año cuando te conocí. Lee la dedicatoria”

Sin titubear abrió el libro y leyó lo que decía.

Para el amor de mi vida:

Este libro lo escribí durante los meses que posiblemente han sido los más confusos de mi vida; amor, tristeza y desesperación mezclados en uno solo. Sin embargo, siempre tu luz dejo a la sombra lo demás y lo que creamos juntos me hizo seguir. Espero disfrutes leyendo este libro dedicado para ti, aquel chico que conocí en un balcón hace más de un año.

Con amor.

Tú esposa, Isabela Bosch

“Gracias” pronuncio él tomándola de la barbilla y besándola tiernamente.

“No, gracias a ti”

Mientras se ponían de pie y miraban a su alrededor llegaron a la conclusión de que mas felices no podían ser. No tenían que pensar en nada más.

Aquella realidad jamás la pidieron y sin embargo ahí estaba. Tenían un hermoso hijo, amigos y familia que los apoyaban y lo mejor de todo. Se tenían el uno al otro.

No podían pedir más.... al menos por ahora.

FIN

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Step in the Name of Love - Capitulo 9

Por: Isabel

Capitulo 9

There’re so many reasons that I find to run to you
Cos there's so little loving in my life, now I’m away
And thinking about it I want things back how they used to be
There is no way round it, nothing good comes easily

So much between us and we both know that it's wrong
So I keep on waiting till I’m back where I belong

BBMak – Miss You More

En realidad no sabia como iniciar, lo primero que salio a su mente fue decirle que su motivo de visita eran ellos. Al ver la expresión en el rostro de Isabela supo que posiblemente esa no era la manera de enfrentar las cosas.

“Lo siento... yo no quise... en realidad”

Pero ella no dijo nada, se puso de pie y caminó rumbo al comedor... él la siguió.

“Isabela, ¿te encuentras bien?”

Ella solo lo abrazo con fuerza y sintió como su pecho se humedecía un poco, estaba llorando por su culpa.

“Por favor no llores, soy un estúpido... debí hablar contigo antes pero me daba miedo que me dijeras que las cosas entre nosotros ya no eran posibles o que habías encontrado a alguien mas o no se, simplemente me aterraba el enfrentar la situación”

“Por favor Mark, cállate”

Al oír aquella orden, por que mas bien sonó a orden él guardo silencio, ¿acaso lo odiaba?. Entonces ella se separo de él y mirándolo directo a los ojos hablo.

“Admito que no fui lo suficiente clara contigo en un principio Mark, pero creo que los dos sufrimos de lo mismo. Miedo a ser rechazados, yo tenia miedo que cuando te dijera que estaba separada salieras huyendo como un pequeño niño asustado y no pude decírtelo aunque tuve muchas oportunidades. Pero cuando te enteras hiciste justo lo que pensé que harías, me sentí tan mal por que me di cuenta que era una tonta por no decírtelo antes y después de que no contestabas mis llamadas me sentí peor por que pensé que no te volvería a ver.... entonces, después supe que iba a tener un hijo tuyo y--”

“Lo se y lo siento. Huí como un cobarde pero en realidad no era de ti de quien huía, huía de mis emociones Isabela”

“Te extrañe sabes” Acoto ella limpiando una lagrima y mirándolo profundamente.

Él acerco su mano a su rostro, acariciando su suave piel.

“Yo también te extrañe, mucho... a veces no podía ni dormir”

La abrazo con fuerza y aferro su rostro en su cuello.

“Lo siento, ahora voy a ser papá y no participe un solo segundo en tu embarazo, realmente lo siento, debí estar ahí en lugar de huyendo como un tonto”

“No importa realmente, ahora tienes un mes para enmendarte. Logan te perdona, lo siento patalear”

El rió divertido y a la vez sintió un poco de melancolía, no ayudo a elegir el nombre del pequeño. Ya se desquitaría cuando tuvieran más.

“Mas le vale por que este mes no se deshace de mi”

“Y bueno, ¿quieres cenar?” preguntó ella señalando la mesa “Supongo que Pierre no vendrá, ¿no es así?”

Él asintió.

“Lo sabia, él planeo esto. Me las pagara después”

“Vamos, él solo quería ayudar”

“No lo defiendas, actuó a mis espaldas”

La forma en que ella lo miro le dijo todo: No le cobraría nada a Pierre, le estaba agradecida.

Minutos después la cena estaba servida.

“Huele delicioso, ¿lo hiciste tu?”

“Por supuesto Mark, es lo que a Logan se le antojo, vamos sentémonos”

Isabela no terminaba siquiera de masticar su primer bocado cuando miro a Mark preocupada, mientras masticaba sintió un liquido caliente recorrer sus piernas y eso solo podía significar una sola cosa.

“Mark”

Pero él estaba tan concentrado comiendo que parecía no prestar atención, desesperada lo llamo con más fuerza hasta hacerlo reaccionar.

“Mark, ¡MARK!”

El tono de voz que ella le proporciono le hizo alzar la vista del plato y apenado intento excusarse.

“Lo siento, es que esta delicioso y no pude evitar---”

“Olvida la comida por un segundo, ¿en que viniste hasta acá?, ¿en tu auto?”

“No, ya no lo tengo”

“¿¡QUÉ!?, ¡Estas loco! lo necesitamos en este momento es de vida o muerte”

Ella se puso de pie pensando lo peor y comenzó a caminar hacia la puerta desesperada y él la seguía confundido.

“Isabela que sucede, no tengo el auto lo eh vendido”

Pero ella se volteo y lo miro respirando agitada.

“Mark, se rompió la fuente. Logan viene... Logan viene, toma mi maleta de ahí de mi habitación. Llamare un taxi”

Mark no sabia como reaccionar, estaba en shock... ¿acaso no faltaba un mes para que Logan naciera?. Aquello no significaba nada bueno, lo siguiente lo hizo olvidar todo pensamiento.

“Mark, reacciona por favor.... ¡Logan!”

Sin decir mas corrió rumbo al cuarto de ella y tomo la pequeña maleta que tenia en el suelo a un lado de la cama... desesperado corrió hacia la puerta y vio a Isabela llamando por teléfono, lo retiro de sus manos y colgó.

“¡Mark que te pasa!, el taxi....¿como vamos a llegar?”

“Manejando” dijo él abriendo la puerta e incitándola a salir, mientras sacaba de su pantalón unas llaves. Frente al lugar se encontraba una trail blazer negra.

“Cuando supe que probablemente después de hoy las cosas mejorarían y en vista de que ya no seriamos dos sino tres vendí el Porsche 911 pero saque esta camioneta... espero no te moleste”

Pero Isabela no contesto, comenzó a respirar con mucha dificultad y grito.

“¡Vamonos!”

El caminó al hospital les pareció mas largo de lo en realidad fue, Mark no tenia la mas mínima idea de cómo ayudarla a respirar o algo... en cambio ella parecía manejarlo bastante bien, a pesar de estar un poco nerviosa y angustiada.

Una vez en el hospital Mark busco a alguien que los atendiera. Poco después Isabela se encontraba entrando a la sala de parto con un asustado Mark al teléfono... tenia que avisarle a Pierre sobre esto.

-...-

“Gracias por avisarme Mark, ha sido hermoso”

Pierre se limpio la última lágrima mientras veía como Isabela tomaba al pequeño Logan entre sus manos y le besaba la frente. Mark no dijo nada, contemplaba la escena conmovido... ¿acaso así se sentían todos cuando se convertían en padres?

“¿No es hermoso?”

La voz de ella lo regreso a la realidad, le mostraba a Logan directamente desde la cama y el pequeño movía sus manitas inquieto mientras dormitaba.

“Demasiado” dijo él acercándose y tomando una pequeña mano de él entre sus manos y besándola tiernamente. “Se parece a su madre”

“Ohh, no seas exagerado Feehily. Se parece a los dos... tiene tus labios”

Isabela lo recostó en su pecho y Mark se acerco a ella dándole un pequeño beso en los labios.

“Mmm... creo que es hora de irme”

Ambos miraron a Pierre mientras salía del cuarto y sonrieron divertidos.

“Te amo” dijo Mark mientras la miraba a los ojos.

“Eso ya lo se”

No tenían nada más que decir, lo mas importante en ese momento parecía ser que era observar al pequeño bebe que Isabela sostenía entre sus manos y estaba envuelto en una frazadita que ella le había comprado especialmente para cuando llegara al mundo.

Por su parte Pierre se sentía muy contento por dos razones, su mejor amiga había recuperado a quien amaba (por que estaba seguro de que así era) y también gozaba de ser una mamá nueva en este mundo, sin embargo sentía un poco de melancolía por que eso también significaba que ahora pasarían menos tiempo juntos y sumando a todo eso el hecho de que definitivamente su vida amorosa no iba de lo mejor no creía que fuera el mejor de sus tiempos, pero tal vez eso estaría por pasar a un segundo plano.

“Disculpa, ¿sabes donde esta el 11g?”

Un joven rubio de ojos grises se acerco a él con un papel y unas rosas en las manos. Pierre sonrió, si hay algo que todos siempre tenemos asegurados es el no, pero presentía que un SI podría estar mas cerca de lo que pensaba. Así que él tomaría cartas en el asunto.

“Si gustas puedo llevarte”

Él chico no dijo nada, solo asintió y se dejo dirigir rumbo al lugar que necesitaba llegar.

En el camino Pierre descubrió que venia a visitar a su hermana que estaba hospitalizada y que no tenia pareja de ningún tipo en ese momento... no estaba tomando demasiadas esperanzas pero si su sexto sentido no le fallaba, aquí podría suceder algo.

Si de algo se sentía mas que seguro a partir de ese momento es de que siempre todos tenemos una oportunidad mas para enmendarnos o iniciar de cero, la decisión de llevarlo a cabo no es de nadie mas que nosotros.

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Step in the Name of Love - Capitulo 8

Por: Isabel

Capitulo 8

El día había estado mas pesado de lo que pensaba, no había descansado un solo momento desde el momento de llegar a la oficina y para terminar de acabarla no dejaba de pensar una y otra vez en el que decirle a Isabela una vez teniéndola frente a frente, las palabras que Pierre le había dicho aquella noche no ayudaban mucho.

“¿Y que se supone que le diga una vez en la puerta Pierre?”

“Algo así como: ¡Aquí estoy mi amor!. Sinceramente no se Mark, creo que ya eh pensado mucho en el asunto, eso te lo dejo a ti”

“Si tan solo no fuera tan difícil”

“¿Qué cosa?” pregunto Kian entrando a su oficina y sentándose frente a él “¿Qué harás esta noche?”

“Iré a ver a Isabela y francamente no se que decirle” Se froto la frente frustrado.

“Mark, deja de pensarlo tanto. Seguro que una vez frente a ella todo saldrá bien, solo un consejo que aprendí de mi hermana. Espera el momento oportuno para los reclamos, si se lo sueltas así nomás las cosas no terminaran bien”

“Gracias, lo tomare en cuenta”

“No hay de que... yo no se que haré esta noche, supongo que iré de juerga a alguna disco. Mis padres no están en la ciudad y no pienso irme a casa de mi hermana con su marido y sus tres chiquillos, no resistirías un segundo en su casa” después de meditarlo un segundo agrego “Demonios, necesito una novia”

-...-

“Uno, dos, tres”

Isabela contó por última vez la cantidad de velas que quedaron en la mesa. Estaba todo listo, solo faltaba que llegase Pierre para iniciar. Miro al reloj una vez más, las diez menos cuarto, inquieta se dirigió a la puerta.

“No tardara en venir” dijo por tercera vez y camino con rapidez de regreso a la cocina.

Justo cuando se sentó en la silla del lugar el timbre sonó, había llegado.

“¡Voy!”

Caminó rápido hasta la puerta y se quedo de piedra al ver a Mark en su puerta.

“Hola, ¿puedo pasar?”

Sin decir nada lo dejo pasar, nerviosa se pregunto que hacia Mark ahí en la víspera de navidad. No logró registrar nada hasta el momento de encontrarse los dos frente a frente en la sala y ella tomaba asiento, él la observaba y buscaba constantemente su mirada pero ella lo evitaba.

“Y dime, ¿qué te trae por acá?” pregunto sin mirarlo a los ojos.

“Tú, es decir... ustedes”

Por primera vez lo miro a los ojos y sintió como se le humedecían. No se sentía preparada para enfrentarlo, no ese día... no en ese momento.

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Step in the Name of Love - Capitulo 7

Por: Isabel

Capitulo 7

La navidad llego mas rápido de lo esperado para Isabela, tenía muchas cosas pendientes por hacer antes de navidad y esperaba que las cosas salieran a pedir de boca.

Pierre le había dicho que el veinticuatro por la noche deseaba tener una cena familiar y que esperaba la mejor comida hecha jamás en Londres; y es que cena familiar considerando que los padres de él estaban tres metros bajo tierra y sus hermanos no lograban aceptar su condición se limitaban a ella, él y el pequeño Logan – finalmente había decidido ponerle Logan después de una larga lista de nombres, había leído en un libro de psicología que lo mejor era hablarles por su nombre aun estando en el vientre – el cual nacería dentro de un mes.... estaba tan ansiosa por su llegada.

Pero mientras ella se preocupaba aquella noche por la cena y todos los pormenores Mark recibía una aparición inesperada.

“¿Pierre?”

Y es que si esa no era una aparición inesperada no sabría como llamarle, aquella noche había ido a uno de los restaurantes mas prestigiados de la ciudad a tener una cena con unos importantes personajes cuando se encontró con Pierre en el baño del lugar, observándolo fijamente desde la puerta.

“No Mark, soy el fantasma que te sigue a todas partes, ¡por supuesto que soy Pierre!” Dijo acercándose a él y esperando a que Mark terminara lo suyo.

“¿Qué quieres ahora?”

Mas que molesto estaba incomodo, no sabia como era que él había llegado hasta allá y como era que se encontraban en el mismo lugar... eso no podía ser una coincidencia, sin pensarlo dos veces se imagino que estaría en aquel lugar con Isabela y sintió un escalofrió subirle y bajarle por la espina.

“No vine con ella Mark, si es lo que piensas. Más bien vine a hablar por segunda y ultima vez contigo. Después de hoy y si no lo piensas créeme que será la ultima vez que intente fungir como cupido entre ustedes dos y le buscare nuevos y mejores prospectos a mi amiga... que bien se lo merece por cierto”

Mark palideció al imaginarla con otros hombres y negó con la cabeza.

“Ok, supongo que debería ir al grano. Ya tiene ocho meses Mark, esta ansiosa por que Logan nazca”

“¿Logan?” Inquirió Mark al momento de oír el nombre.

“Si, Logan. Leyó en un libro que debía llamar al niño por su nombre desde el vientre pero ese no es el caso... a lo que vengo es a proponerte algo. Mark, es la ultima vez que te ayudo y me gustaría que lo consideraras, esto es importante”

Mark siquiera lo pensó antes de contestar, tal vez era hora de enfrentarlo de una vez por todas. Aunque el pensar en lo que Pierre planeaba le daba un poco de miedo.

“¿De que se trata?”

“Bueno, el veinticuatro tenemos una cena familiar ella, Logan y yo... al menos eso es lo que ella cree”

Mark escucho atentamente a todas las palabras que Pierre le decía sin perder un solo detalle, parecía ser que lo había planeado minuciosamente. Esta vez no debía estropearlo y costara lo que costara, no perdería la última mano que le daban en cuanto a ella.

-...-

“Pierre ya tengo todo listo, pero no pienso revelarte nada hasta mañana.... ¡te va a encantar!”

Al siguiente día en la noche su plan se llevaría a cabo y si todo resultaba tan bien a como lo tenia planeado sin duda alguna las cosas finalmente serian a como debieron ser desde un principio. Sonrió al verla tan contenta y entusiasmada con la idea de la cena, no paraba de hablarle al pequeño Logan y decirle que esa seria su primera cena de navidad y que debía comportarse así como disfrutarla.

“Déjalo en paz Izzy, lo vas a volver loco al pobre aún antes de salir”

“No empieces, admito que me pongo un poco loca con el asunto de Logan, pero es que lo quiero tanto Pie. Me muero de ganas por verle... me pregunto si tendrá los ojos verdes o azules o si se parecerá a mi o a su padre”

“Yo solo espero que finalmente todo se resuelva” Inquirió él poniéndose de pie, listo para salir del lugar... tenia algunas cosas que hacer.

“¿A que te refieres con eso Pierre?”

“A que estas demasiado sola Izzy, admito que yo te hago una gran compañía pero no es lo mismo. Necesitas un compañero para que juntos críen al pequeño Logan”

“Yo sola puedo hacerlo Pie, ¿acaso no me crees capaz?”

Pierre suspiro, ya se estaba molestando. Esa jamás fue su intención.

“No me refiero a eso y lo sabes Isabela. Es decir, ¿Y tu felicidad donde queda?... tu también tienes derecho a hacer tu vida, encontrar alguien que te ame y compartir tu vida con esa persona y Logan. Y lo sabes”

“Lo se Pie, pero por ahora no creo que sea el mejor momento, mi mayor prioridad es mi hijo y lo demás no me importa tanto.... el tiempo dirá que sucede”

Pierre no dijo mas, se acerco a ella y después de darle un beso en la mejilla se agacho para susurrar cerca de su vientre un ‘esta loca pero te quiere, ¿sabes?’ a Logan y después desaparecer por la puerta.


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Step in the Name of Love - Capitulo 6

Por: Isabel

Capitulo 6

Conforme el tiempo transcurrió Isabela comenzó a olvidarse poco a poco de Mark y sus detalles, no era que no dejara de quererlo pero el tiempo que había pasado lejos de él irremediablemente la llevaba a poner con más facilidad a un lado todo sentimiento de tristeza.

Su embarazo por otra parte se estaba desarrollando de manera satisfactoria, ya sabia el sexo del bebe y estaba pensando seriamente en el nombre que le daría a su pequeño nene, si... iba a ser mamá de un niño.

Al recibir esa noticia Pierre pensó que era la mejor de todas ya que podría enseñarle a como conquistar a una mujer, después de todo el era casi como una mujer y podía darle los mejores tips, aparte de llevarlo a pasear y a hacer cosas de hombres, él seria como un tío para él y padre en lo que ella conseguía un nuevo papá para el nene. Cosa que no dudaba en lo absoluto.

“Pásame el cereal”

Eran cerca de las seis de la tarde y Pierre hacia su visita del día en casa de ella. Solo para checar como estaban las cosas.

“¿El niño tiene hambre?” Pregunto mientras se dirigía a la cocina por el entero paquete de choco crispis, cereal que parecía ser el preferido del pequeñín.

“Si, tendré que ponerme a régimen en cuanto nazca este pillo. Con tanto cereal me inflare como globo”

“No lo creo”

La mirada que Isabela le dio era de molestia, últimamente su temperamento no era el mismo.

“Tranquila, no estoy agrediéndote ni nada”

Ella rió divertida, era tan susceptible en ocasiones que no se reconocía a si misma, sin embargo disfrutaba un poco de ese estado por que le proporcionaba un poco de “autoridad” ante todos los demás, parecía ser que con solo pronunciar una silaba todos entendían a la perfección sus deseos y los llevaban a cabo, tener a este niño era lo mejor que le había pasado.

-...-

A diferencia de Isabela, Mark no la estaba pasando tan bien. Y no tenía nada que ver con el amibito laboral, mas bien en el personal, desde aquel día que la vio en la librería y acobardado huyo no había dejado de darle vueltas al asunto de hablar con ella... pero simplemente no se atrevía.

Kian, como el buen amigo que era estaba al tanto de la situación – claro esta después de insistirle mucho de que le dijera que era lo que rondaba por su cabeza, Mark no era de los que te decían las cosas por si solo – le había recomendado que fuera y enfrentara directamente a Isabela.

“Mark, si tanto te intriga todo este asunto deberías ir a hablar directamente con ella” dijo aquella misma mañana mientras tomaban el café y Kian reconocía una vez mas en Mark aquel estado como hipnótico que cargaba desde hacia un tiempo.

“Es que Kian decirlo es tan fácil, no me atrevo ahí algo que no me permite ir y hacerlo y.... no puedo, simplemente no puedo”

“¿Te doy un sabio consejo?”

Mark no contesto nada y aunque le hubiese dicho que no de todas maneras Kian pensaba decírselo.

“Cuando se quiere se puede... sabias palabras. Mark lo que pasa es que creo que realmente tienes miedo de enfrentar la situación y darte cuenta de que el único tonto aquí has sido tu, el hecho de que su amigo haya ido incluso a buscarte para decirte que estaba embarazada no me suena a algún truco para amarrarte... creo que ella debe tener lo suficiente para mantenerse toda una vida por si sola. No te engañes”

“¡Kian no creo que ella quiera amarrarme por Dios santo!, ¿cuántas veces tengo que repetírtelo?.... no es eso”

Desde que esa situación había quedado ante los ojos de Kian, este no dejaba de decirle que él tenía el presentimiento de que Mark se sentía presionado... como si ella intentara amarrarlo al compromiso. Y eso lo sacaba de sus casillas.

No sabía realmente a que huía pero estaba seguro de que no era eso.

“Puedes engañar a tu conciencia Mark Feehily, pero el subconsciente no es tonto... nada tonto así que si lo que quieres engañarte aún más; ¡bien!, pero después no me digas nada”

Después de un incomodo silencio la charla continuo entre bromas antes de regresar al trabajo y aunque intentaba mantenerse tranquilo con su conciencia, realmente no lo lograba.

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Step in the Name of Love - Capitulo 5

Por: Isabel

Capitulo 5

Las palabras de Pierre resonaron por sus oídos durante esos últimos meses, no estaba seguro del si debía seguir a las indicaciones de Pierre y lo que su ansiedad le indicaba o simplemente dejar las cosas como estaban. ¿Si ella estaba embarazada se lo habría notificado no es así?.

Pero no lo había hecho y eso era lo que mas le intrigaba y lo llevaba a dudar de la procedencia del bebe a pesar de lo que Pierre le había afirmado, ¿iba a ser papá?.

Antes solía caminar directo a la librería que quedaba cerca de su trabajo a la hora de la comida para ir a ver que libros nuevos habían, pero el solo hecho de pensar en eso le hacia regresar sus memorias hasta Isabela y por eso hacia mas de dos meses no ponía un solo pie en aquella librería, hasta ese día.

Probablemente fue intuición lo que lo llevo a entrar por aquella puerta y hojear algunos libros que se veían interesantes, lo cierto es que no pudo evitar sentirse nervioso al sentir y ver un par de ojos mirándolo desde el otro lado del establecimiento.

“Isabela”

-...-

Mientras lo miraba, una niña insistía en tener su atención para firmar el que podría ser el ultimo libro del día, pero ciertamente toda su atención la ocupaba Mark; él cual al notar la insistente mirada se dirigió hacia ella.

“Señorita” Dijo una vez mas la pequeña tirando de su suéter y rompiendo así el mágico momento que Isabela comenzaba a crear en su mente.

“¿A nombre de quien pequeña?” Pregunto sonriendo tiernamente y mirando de reojo al frente en busca de Mark.

“Alicia”

Sin mirar detenidamente hacia donde había visto a Mark se dirigió a la pequeña y comenzó a firmarle con mucho cariño su dedicatoria, justo después se agacho y comenzó a poner un poco de maquillaje en su rostro, intentando no parecer tan pálida al momento que Mark se acercase a ella, por que se iba a acercar... ¿no era así?

“¿Qué haces?” pregunto Helen tomándola del brazo y sentándola correctamente

“Nada, nada en especial” Replico ella acomodándose una vez mas el cabello y Helen miro a los lados intrigada.

“¿No será que viste algún lindo chico y no quieres que lo vea?”

Helen, su editora era al menos unos dos años mayor que ella y deseaba verla llegar tan lejos como siempre lo había soñado. Aun así, eso no quitaba que en ocasiones fungiera también como algún tipo de mala amiga que la quería inducir a comportarse de manera indebida, su estatus casi natural de soltera la llevaba a comportarse en ocasiones como una chica de veinte años.

“No” dijo ella antes de romper en risa, a veces Helen podía hacerla reír con el comentario más tonto.

“Mmm, esta bien te creo. Pero donde me salga un chamacon estaré segura de que me lo ocultaste”

Después de aquellas palabras la delgada figura de Helen se perdió entre los estantes y ella miro nerviosa al frente de la tienda, después a un lado... termino poniéndose de pie e intento detectar en alguna parte la esbelta figura de Mark. Pero no la encontró, se había ido sin hablar con ella.

Estaba a punto de derramar la primera lágrima cuando Pierre apareció frente a ella con un bello ramo de rosas.

“¡Pierre!” exclamo ella tomando el ramo y abrazándolo “¿Y esto?”

El chico de ojos verdes beso su mejilla y después agrego.

“Te mereces esas y muchas mas. ¡Felicidades por tu libro nena!”

“No tenias que molestarte” Replico ella emocionada.

“Mi placer... ahora vamonos, eh preparado una deliciosa cena para los tres”

Isabela lo miro confundida y después cayó en cuentas. Los tres, ellos dos y el bebe.

Si Pierre no fuera gay probablemente estaría perdidamente enamorada de él y sus detalles. Era una fortuna contar con un amigo como él para apoyarla cuando mas lo necesitaba.

-...-

Mark se recostó en su cama aquella noche sintiéndose el mas cobarde de los hombres, habría podido hablar con ella y sin embargo al verla reír tan contenta mientras charlaba con aquella mujer se dio cuenta de que no podría enfrentarla, además estaba seguro de que estaba feliz. Se le veía sana y más hermosa que nunca.

La mujer que conoció delgada ahora estaba mas robusta pero sin perder aquella belleza que la caracterizo desde el principio, sus mechones obscuros de cabello estaban sueltos y caían detrás de su espalda rizándose solo un poco, sus ojos entre grises y verdes lucían mas claros que nunca y su ahora notoria panza de embarazada la convertían en la mamá mas hermosa que jamás haya visto.

Sin embargo, no tardo mucho en quedar profundamente dormido, teniendo como ultima imagen del día el bello rostro de Isabela.

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Step in the Name of Love - Capitulo 4

Por: Isabel

Capitulo 4

Mientras tanto Mark se encontraba más concentrado que nunca en su trabajo pero irremediablemente llegaba el momento en que pensaba en ella, ¿por qué no podía tan solo superarlo? Había sido algo muy hermoso... el tiempo que duro.

Sin darse cuenta una vez mas regreso su mente a la escena que lo hizo querer olvidarse de todo ese asunto por completo, repetir aquello en su mente era algún tipo de tortura que su mente efectuaba por si misma.

-...-

Después de técnicamente un mes alejado de ella, a decir verdad tres semanas y media sin verla, y sabia que había sido así por que los había contado. Se dio cuenta de que no podía hacerse el tonto y mantenerse indignado con ella por no haberle contado aquel “pequeño” detalle de estar casada, además él jamás le pregunto si era casada. Aunque claro, nunca pensó algo así.

Así fue como llego al departamento de ella decidido a decirle que había sido un tonto y deseaba intentarlo nuevamente, o eso pensó hasta el momento de llegar a las escaleras cercanas a su apartamento y ver algo que jamás se espero.

“Bueno, creo que es hora de que me vaya”

Un hombre alto y cabellos rubios estaba en el umbral de la puerta del departamento de ella, mientras que esta asentía a sus palabras.

“Si Jon, nos veremos después”

Suponiendo que finalmente ella y su marido habían terminado en buenos términos estaba decidido a acercarse y saludar cuando de pronto vio como él la tomaba del rostro y comenzaba a besarla. Ella cerró sus ojos y una vez separados, entro a su departamento.

Él no quiso ver más, lo había arruinado. Su única reacción fue salir de ahí lo más pronto posible y no volver más.

-...-

“¿Estas ahí Mark?”

Estaba discutiendo un asunto importante con Kian cuando aquel recuerdo vino a su mente, pero decidió dejarlo a un lado para hablar de la importancia que tenían en la sociedad actual las relaciones internacionales.

“Si Kian, ¿en donde nos quedamos?” Inquirió mirando a su amigo.

“Como te iba diciendo...”

El sonido de la puerta fue lo siguiente que interrumpió aquel asunto y mientras su secretaria entraba, él la miro de manera furtiva.

“Lo siento Sr. Feehily, pero aquí afuera se encuentra un joven que dice conocerlo y necesita hablar con usted de manera urgente”

“Dígale que estoy ocupado Sonia”

“No, no te preocupes Mark. Después terminaremos con esto, tu atiende a tu amigo”

Kian salio con rapidez del lugar y Mark solo miro a Sonia indicándole que dejara pasar a su “amigo”. Aquel joven que vio entrar por la puerta era el último que pensaba encontrar por aquellos alrededores.

Al contrario de él, Pierre sabía exactamente a que iba.

“Pierre, ¿a que debo tu visita?”

“Directo al grano, eso me gusta Feehily”

“Bueno, si de Isabela quieres hablar espero y sepas que ese asunto esta cerrado. Creo que ambos lo sabemos”

“Si, vengo a hablar de ella y no. No creo que este cerrado Mark, deberías tomar conciencia del estado en que la dejaste y por eso me atreví a venir hoy”

“¿Cuál estado? Yo creo que esta de la manera mas fantástica a lado de su esposo. ¿O me equivoco?”

“Si, te equivocas Mark ella---”

“¡Por favor!, si los vi besándose. Ella regreso con él, no creo que valga la pena que me vengas a contar del estado deprimido o lo que sea que vienes a decirme que se encuentra si ella encontró con quien esta feliz, yo soy el que la sufrió todo este tiempo y por si no lo crees pues déjame decirte que---”

Durante todo ese tiempo Pierre había intentado hacer una declaración pero no lograba encontrar el momento perfecto, así que solo lo grito.

“¡ESTA EMBARAZADA!”

Al oír aquello Mark enmudeció y cuando comenzaba a arrugar el ceño Pierre continúo.

“Es tuyo, ella jamás regreso con Jon”

“No te creo” Inquirió Mark dudando.

“Cree lo que quieras, solo quería dejarte las cosas en claro”

Y después de aquello salio con rapidez de su lugar de trabajo.

-...-

Miraba inquieta a la puerta de aquel local, Pierre le había dicho que llegaría sin falta a las cuatro y media de la tarde para recogerla y llevarla directo a su departamento.

Con seis meses de embarazo las cosas se complicaban un poco y aunque aun su panza no estaba muy pronunciada comenzaba a tener los problemas de toda mujer embarazada: hormonas alteradas, humor de los mil demonios, voluble como ella sola, un constante dolor de espalda junto con la hinchazón de pies y no podían faltar sus extraños antojos de media noche.

Pero no todo era malo, gracias a su estado podía pasar la mayor parte del tiempo en casa escribiendo y pensando en como terminaría su libro, mas que ser una crónica de todo lo que Mark despertó en ella se había vuelto su nuevo y mas preciado trabajo.

Ahora después de todos esos meses de arduo trabajo (y muchos regaños por parte de Pierre acerca de su condición y lo mucho que debía cuidarse por el bebe) había terminado y publicado el libro, el cual estaba siendo aceptado de una manera muy buena en el medio.

Su gira promocional solo se iba a limitar a las librerías londinenses ya que no deseaba arriesgarse mucho y en eso se encontraba mientras esperaba a Pierre. Cuando por la puerta de aquel local encontró entrando a la persona que pensó no volvería a ver en un largo tiempo. Mark.

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Step in the Name of Love - Capitulo 3

Por: Isabel

Capitulo 3

Un mes y medio y veinte hojas escritas después mientras salía de la notaria número cincuenta y dos de aquella gran ciudad, Isabela Bosch era oficialmente... libre.

“¿Qué se siente?”

Al oír a Pierre lo único que pudo hacer como reacción fue gritar emocionada, ¿qué se sentía ser libre?. ¡Por supuesto que lo mejor del mundo!

“Ahora supongo que nos iremos directo a una buena fiesta, dime que si”

Agrego Pierre mirándola suplicante, pero ella no tenia planeado nada de eso. Tenía planeada una hora escribiendo en su novela y el resto del día descansando, hacia unas semanas que se sentía bastante agotada.

“No creo Pierre, estoy algo cansada”

“Esta bien. Yo celebrare por los dos, pero antes te acompañare a tu apartamento”

“Esta bien”

En cuanto entraron al departamento Pierre se fue directo a buscar un poco de agua y después la siguió hasta su habitación, lugar donde últimamente la podías encontrar las veinticuatro horas al día, técnicamente.

“Ya esta” Dijo ella tomando su laptop y acomodando en la cama “Puedes irte a festejar”

“Mmm, no se. ¿Por que no vamos a comer primero?, son la una de la tarde”

“Pierre, acabo de recostarme” Aclaró apuntando a la computadora.

“Un poco de comida no te hará mal”

“Esta bien, pero yo elijo que comeremos”

Él la miro no muy convencido, pero con tal de verla lejos de aquella cama asintió.

“Pizza, hace días cargo un antojo de pizza que no logro sacarme de la cabeza, ¿qué dices?”

“Bueno, pero tu sabes que solo la como por respeto a Italia, la pizza engorda”

Ella rió ante su comentario y poniéndose de pie camino junto a él hasta la sala, mientras hablaba por teléfono a la pizzería.

Mas tarde se encontraban los dos disfrutando de una deliciosa pizza de pepperoni y platicando de diferentes temas. Hasta que Pierre no se aguanto y toco el tema de Mark.

“¿Qué hiciste al final con ese bombón político?”

Ella se puso seria y después de deglutir una última mordida de pizza respondió.

“Lo eh dejado por las buenas, creo que no volverá. Pero lo extraño Pierre, era simplemente... mmm... no se como explicarlo”

Él no pudo más que sonreír al verla de esa manera, siquiera cuando fue novia de su actual ex marido hablo así.

Se preguntaba que habría hecho ese Mark para engatusarla de esa manera y se dijo una vez más que a veces los hombres eran tan estúpidos por dejar a las mujeres de esa manera, a momentos tenia complejo de mujer abandonada y no podía más que reír ante su propia condición.

“Pero bueno, ¡voy al baño!”

Reacciono al oírla decir eso y espero.... y espero verla regresar. Pero al ver que no regresaba se alarmo.

Lo siguiente que vio no fue la cosa más agradable para él, su querida amiga estaba totalmente pálida y desmayada en el piso del baño.

Gracias a Dios no estaba lastimada, pero necesitaba un hospital rápido, su primera reacción fue llamar al hospital y en menos de diez minutos la llevaban directo al hospital más cercano, con él como guardián y la desesperación a flor de piel.

-...-

Cuando abrió los ojos lo primero que vio fue una luz que la deslumbraba, puso su mano frente a sus ojos intentando no mirarla y entonces oyó a Pierre gritar a todo pulmón.

“¡Ha despertado Doctora!”

“¿Pierre?” Fue todo lo que pudo decir cuando al fin logro abrir los ojos y ver que se encontraba en un hospital “¿Qué estoy haciendo aquí?”

“Se ha desmayado, creo que es una reacción totalmente natural en su estado”

Con la ayuda de Pierre había logrado sentarse y él la miro profundamente a través de sus cristalinos ojos verdes.

“¿Mi estado?”

Preguntó preocupada y mirando alternadamente a Pierre y la Doctora ahora presente en su cuarto de hospital.

“Si Srita Bosch. Usted va a ser mamá”

“¿Qué?, no doctora usted esta equivocada yo no eh tenido relaciones sexuales de ningún tipo en... dos meses aproximadamente” Dijo al caer en cuenta que cuadraba perfectamente con el tiempo que llevaba sintiéndose enferma.

Pero la doctora le gano al aclarar su visible sospecha.

“Así es, tiene dos meses de embarazo. ¡Felicidades!”

“No puede ser”

La última posibilidad de que alguna vez se embarazara la había perdido cuando descubrieron Jonathan y ella que él era estéril y ahora por no cuidarse adecuadamente en su única noche a lado de Mark se encontraba en aquella condición.

Iba a tener un hijo de Mark.

Y lo último que escucho antes de sentirse desfallecer fue la voz de Pierre llamándola preocupado.

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Step in the Name of Love - Capitulo 2

Por: Isabel

Capitulo 2

Tenia la expectativa acerca de una mejor vida unos días antes pero realmente para aquel día no podía sentirse realmente segura de que las cosas fueran así.

Habían sido ya dos semanas sin saber absolutamente nada acerca de Mark y estaba decidida a dejarlo por las buenas después de que había intentado comunicarse con él en mas de una ocasión para dejar en claro el estado de las cosas. Al no encontrar respuesta decidió continuar con sus cosas a como normalmente solían ser, pero no podía dejar de pensar en él... lo extrañaba tanto.

Sin embargo estaba intentando seguir adelante, de hecho aquel proyecto con el cual había comenzado a trabajar en secreto después de conocerlo estaba creciendo día a día, maquilando en su mente las situaciones que le hubiese gustado vivir con Mark.

Y en ese se había concentrado hasta aquel día, estaba sumamente nerviosa y sabia que probablemente su vida cambiaria después de ese día. Era el día de la última cita con Jonathan para los papeles del divorcio, en esta plática quedarían totalmente saldadas todas aquellas discusiones acerca del dinero y la única propiedad que poseían juntos y por la cual ella no tenía el más mínimo interés de pelear.

Estaba sumergida en sus pensamientos cuando Pierre irrumpió en su habitación. Desde lo sucedido con su pareja se había instalado con ella y pensaba acompañarla durante unas semanas más.

“¿Pensando en la gran cita de hoy?”

El tono de su voz era tan sarcástico que logro sacarle la risa que no había botado en un par de días.

“Si, mas bien ansiosa... después de este día es cuestión de esperar un mes a que los papeles estén listos para firmar. No puedo esperar Pierre”

“Ay nena, pronto serás tan terriblemente libre como yo y entonces saldremos juntos a conquistar chicos, ¿qué me dices?”

Ella lo miro con complicidad y después agrego dejando ver una sonrisa apagada.

“No se, yo creo que seria mejor concentrarme en mi trabajo. Helen quiere ver un nuevo proyecto, lo que no sabe es que hace cuatro meses gracias a ella lo comencé”

“¿Cuatro meses?” Pregunto Pierre, tomando lugar en la cama de ella mirándola intrigado.

“Si, cuando lo conocí”

-...-

Era la fiesta más importante del año, muchos jóvenes reconocidos desde el mundo de la música hasta la política se encontraban ahí, entre ellos se encontraba ella. Isabela Bosch.

Este tipo de fiestas no eran ni remotamente el tipo de fiestas a las cuales ella a sus veinticuatro años y recién estado de separada desearía ir. Preferiría una llena de amigos o probablemente una disco.

Pero no esta, solo había decidido ir ante la insistencia de su editora al expresarle abiertamente que era mas que nada una responsabilidad de ella como una de las mejores escritoras de Gran Bretaña asistir a un evento de esta índole. Más tarde se lo agradecería.

Eran pasadas de la media noche cuando ella estaba fastidiada de morar por el balcón en busca de algo remotamente que hacer cuando él apareció a su rescate, enfundado en un armani con los ojos mas azules que jamás haya visto en su vida la abordo directamente.

“¿Isabela Bosch?”

Ella le miro un poco intrigada, preguntándose por que aquel chico parecía conocerla, entonces lo comprendió.

“Eres la escritora del libro, Joseline & Paul. ¿No es así?”

Alzó una ceja extrañada de que un chico leyera sus libros, generalmente lo hacían las mujeres y solo encontraban en ellos una novela rosa, cuando en realidad para ella eran más que eso.

“Así es, ¿lo has leído?”

Pregunto tratando de cerciorarse de que su deducción fuera la correcta.

“Por supuesto que si, todos tus libros. Me parece muy interesante la manera en que plasmas a la vida, ocultando entre las novelas rosa múltiples maneras de enfrentar a la vida... eres estupenda”

Ella lo miro asombrada y sintió algo burbujear en su estomago al oírlo decir eso.

Nunca antes nadie se había expresado de aquella manera de sus libros, era el primero en lograr encontrar el verdadero significado a todas esas historias que ella escribía y catalogaban como rosas... una manera de enfrentar a la vida, esa era la definición correcta. Y el hecho de que un chico tan atractivo lo descubriera le hacia tener interés en el que podría decir.

“Me parece estupendo que lo veas así, la mayoría solo cree que son novelas rosa. Pero dime, ¿cómo te llamas?”

“Mark, Mark Feehily”

-...-

Y así había iniciado todo.

Tres días después tuvieron su primera cita y descubrió que no solo era un lector y no tan fan de ella a como creyó a primera vista. Si no también trabajaba arduamente como político en una dependencia del gobierno y no solo eso, tenía veinticinco años, soltero y era interesante en todos los aspectos, al menos para ella.

Sin darse cuenta empezó a escribir pequeños fragmentos acerca de una historia de amor la cual iba detallando bastante claramente su situación con Mark, la única diferencia era que en su historia ellos vivían en la transición de los años cuarenta a los cincuenta.

A cada cita, a cada mes y cada momento que lo conocía su historia iba evolucionando a tal punto que era irreversible, su mente divagaba por si sola y la historia se estaba desarrollando por si sola. Hacia meses que no se sentía tan bien, sobre todo después de que Jonathan la dejara por aquella otra mujer.

Pero en ese momento Mark Feehily y su historia eran lo de menos, por que estaba por afrontar a su marido en menos de treinta minutos.

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Step in the Name of Love - Capitulo 1

Por: Isabel

Capitulo 1

El sol ilumino su cara a través del cristal del cuarto, era otro día como cualquier otro. Al menos eso pensó hasta sentir el calor que el cuerpo que compartía la cama con ella le proporcionaba. Tal vez a partir de ahora todo seria diferente.

“Buenos días belleza” Pronuncio él mientras se acomodaba de la manera mas cómoda y panorámica posible, lo único que deseaba era adorarla por el resto de sus días.

“Hola” fue todo lo que recibió por respuesta. Inmediatamente después ella se puso de pie y camino directo al baño.

Después de todo necesitaba ordenar un poco su mente. Se acomodo en el retrete mientras pensaba en el como había terminado de esa manera.

Cuando lo conoció lo menos que pensó era en terminar como su amante y ahora tras haber sucedido aquello, lo único que llegaba a su mente era el remordimiento de no haber sido totalmente clara... de ninguna manera le había mentido, pero él no estaba totalmente enterado de su condición.

Su vida parecía ser sencilla ante los ojos de cualquier otra persona. Ella una mujer con estudios terminados, decente, guapa, conservada, alocada y como broche de oro (solía decir su gran amigo Pierre) escritora por profesión.

Pero las cosas dentro de su vida no eran tan sencillas, después de haber acumulado una gran cantidad de éxitos en su carrera como escritora, parecía ser que ya no le llamaba la atención como antes; eso a ella realmente no le importo hasta el momento de conocer a Mark Feehily.

Político por profesión, guapo y sobre todo (pensó mientras suspiraba) buen amante. Eso había quedado más que claro la noche anterior, y nadie la sacaría de aquella conclusión, lo que Mark no sabia es que ella estaba casada, bueno... separada.

“Isabela, ¿te encuentras bien?”

Él tocaba la puerta discretamente mientras ella se levantaba y abría el grifo de la llave para aparentar, visiblemente nerviosa.

“Si, estoy bien Mark. En un momento salgo”

Después de aquella confesión por su parte no lo oyó mas, se lavo la cara tranquilamente y después se miro al espejo determinada a dejar muy en claro cual seria la situación de ese momento en adelante. No quería perderlo, pero tampoco deseaba mantenerlo engañado.

Cuando salio del baño él la esperaba sentado al borde de la cama con el periódico en mano, recién vestido. Parecía particularmente concentrado en algún artículo.

Mientras tanto, ella se encargo de buscar todas sus prendas por la habitación, al medio día tenia una cita con su editora y necesitaba llegar a tiempo.

“¿Qué harás esta noche?”

Preguntó de pronto mirándola fijamente, ella titubeo por un segundo y después respondió.

“Tengo una cita con... un amigo”

“¿No puedes cancelarla?, tengo ganas de llevarte a cenar”

Ella se sintió alagada ante ese gesto, pero entonces recordó la fría mirada de su esposo... no le perdonaría el dejarlo plantado y entonces tampoco firmaría los papeles del divorcio en el futuro no tan lejano. Tanto que había luchado por ese momento, como para arruinarlo ahora.

“Lo siento Mark, no puedo es algo importante” Dijo poniéndose sus zapatos y acercándose a él con rapidez.

“¿Qué podría ser mas importante que yo?”

Ella suspiro nerviosa, ¿seria correcto decirle la verdad?.

“¿Hay algo que quieras decirme?”

Pregunto consternado, ella tomo una bocanada de aire antes de contestar.

“En realidad si Mark, es algo que no te había dicho y creo que es necesario que lo sepas yo estoy...”

Pero el timbre interrumpió su declaración, él la miro a modo de que continuara mientras el timbre dejaba de sonar.

“Mark yo estoy...”

El timbre sonó por segunda vez interrumpiéndola.

“Espera aquí, iré a ver quien es”

En cuando abrió la puerta supo que lo que estaba por venir no era nada bueno, Pierre totalmente alcoholizado de pies a cabeza con la mirada mas triste que le hubiese regalado en los últimos meses, la segunda mirada más triste después de enterarse que su esposo era estéril y su sueño de ser madre no se cumpliría con él.

“¿Qué sucedió?”

“Me dejo, el muy bastando me dejo. Ese es el problema con las parejas, si no encuentran la felicidad al primer momento que encuentran se buscan a alguien mas y deciden dejarte. Ahora entiendo por que te sucedió lo que te sucedió con Jonathan, ¡todos son unos malditos bastardos!”

El odio en su voz era evidente y ella se sintió de pronto mal por su amigo, tenia ya cinco años declarado oficialmente homosexual, un gran espécimen desperdiciado ante aquello, pero en estos tiempos es tan común que realmente no tiene importancia mencionarlo.

Lo tomo de la mano y lo sentó en el sillón mientras limpiaba la primera lagrima que veía derramar a su amigo por un hombre, su primera pareja y le pagaba de esa manera.

“Pierre, se que no vale la pena que lo mencione por que ya lo sabes de sobremanera. Tu mismo me lo dijiste: No vale la pena derramar una sola lagrima por quien no lo hará por ti”

“Pero Izzy, es tan difícil. ¿Sabes lo que es entregar tu confianza y que la rompan de esa manera?. Lo encontré anoche en nuestra cama con otro tipo, ¡estaba disfrutando con otro tipo!”

Su mirada se nublo al momento de oír eso, claro que lo sabia. Por eso se encontraba en la situación en la que estaba.

“No olvides que también me paso a mi Pie, pero ahora debes salir adelante. Hombres como tu pareja y mi Jonathan la verdad no valen la pena”

“¿Quién es tu Jonathan?”

La voz que aparecía por detrás no era ninguna otra que la de Mark Feehily. Ella enmudeció de pronto y antes de poder decir algo mas Pierre mirando al chico de ojos azules respondió.

“Su esposo... están separados”

Ella no dijo nada y se volteo a ver a Mark directo a los ojos, ella respiro hondo esperando oír un discurso acerca de ser sinceros, pero no lo encontró. Tan solo oyó como la puerta de su apartamento se cerraba con fuerza.

“Algo temperamental el muchacho, ¿no crees?”

“Creo que lo mejor es que tomes un baño con agua fría y descanses”

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Step in the Name of Love

“Step in the Name of Love”

Por: Isabel
Clasificación: K
Disclaimer: Westlife no me pertenece ni estoy relacionada a ellos por ningun medio.
Sumario: Isabela es una escritora que esta viviendo uno de los peores momentos de su vida: Su marido la ha dejado por otra. Es ahí cuando su afán por la escritura parece desaparecer, pero entonces conoce algo que le cambia la vida mas de lo que imaginó alguna vez.

Capitulos:

Quisiera Ser - Capitulo 15

Por: Isabel

Capitulo 15

Y finalmente estaba ahí en la Universidad Western Carolina del Norte (WCU). Específicamente en el Colegio de Finanzas y no solo eso, se encontraba lejos de casa; se encontraba en Cullowhee, Carolina del Norte. Se sentía tan bien.

Hacia una semana que había llegado a ese lugar y se había dado cuenta de que su vida daría un verdadero giro y no solo eso. Que seria inmensamente feliz. Sus padres le habían alquilado un departamento a unas cuantas cuadras de la Universidad pero había estado tan concentrada poniendo todas sus cosas en su lugar y conociendo todos los pequeños lugares a su alrededor que había decidido que lo mejor seria dejar la Universidad para lo ultimo. Y no se arrepentía.

Sora aspiró el aire que entraba por sus pulmones mientras estiraba sus brazos con emoción. Finalmente se encontraba en ese lugar donde estudiaría finanzas durante los siguientes cuatro años de su vida. No solo era una de las mejores universidades del país y aquella en la cual se encontraba su carrera, si no también a como se había repetido constantemente en las ultima semanas estaba lejos de casa, lejos de su ciudad natal. Lejos de todas aquellas personas y aunque le doliese admitirlo también estaba lejos de él.

Sacudió su cabeza intentando sacar a Ken de sus pensamientos por centésima vez desde su arribo a aquella ciudad y decidió concentrarse a lo que iba. Conocería el campus y se registraría finalmente, ya era hora de que supieran que una de sus nuevas alumnas había llegado pero sobre todo que había llegado para quedarse.

“Sora, hoy inicia tu nueva vida”

Con la frente en alto camino rumbo a la puerta de uno de los grandes edificios que conformaban la división de finanzas y sin dudar un solo segundo camino hacia las oficinas de servicios escolares.

“Buenos días Srita, ¿en que puedo servirle?”

Una Sra. de aproximadamente cuarenta años la miro desde sus gafas de media luna y le sonrió abiertamente, parecía agradable.

“Buenos días Sra. mi nombre es Sora Naegino, eh venido a registrarme. ¡Voy a estudiar la carrera de finanzas en esta división!” Agrego emocionada mientras la señora esbozaba una pequeña sonrisa en sus labios.

“Bien, entonces necesito que te formes en aquella fila de allá”

La señora señalo una enorme fila de jóvenes de su edad que se miraban impacientes frente a una ventanilla. Muchos de ellos le miraban con curiosidad, otros con un poco de burla. Sora se sintió avergonzada al darse cuenta de su pequeño espectáculo y después de esbozar un casi inaudible gracias se dirigió a la fila.

Después de estar cinco minutos en la fila y mientras Sora comenzaba a sentirse fastidiada una chica rubia que se encontraban justo delante de ella se volteo a mirarla y le extendió su mano.

“Layla Hamilton, mucho gusto”

Sora no contesto nada pero cortésmente respondió a su gesto tomándola de la mano.

“Entiendo que estés fastidiada pero créeme que todos nosotros hemos estado aquí por mas tiempo que tu y aun intentamos parecer amigables los unos a los otros. Sora”

Sora la miro con los ojos como platos y antes de poder replicar Layla rió.

“Lo siento, al igual que muchos otros en la fila no pude evitar oírte mientras gritabas a todo pulmón tu nombre”

Sora sonrió a la chica por primera vez, no solo estaba un poco apenada sino tambien debía admitir que aquella nueva amiga intentaba ser solo amable.

“Siento haber sido grosera, no suelo serlo. Solo que no imagine que esto seria tan lento; ya me veía a mi misma recorriendo el campus”

“No te preocupes que parece ser que la Señora que atiene el modulo ha regresado de su almuerzo. No tardamos en pasar”

“Gracias, ¿Qué vas a estudiar tu?”

“Estudio Contaduría, me eh trasladado desde la Universidad de Chicago por motivos personales. Así que como soy relativamente de nuevo ingreso debo registrarme. Iniciare el cuarto semestre”

Mientras su pequeña charla crecía iban avanzando en la fila, Layla le había parecido muy amistosa y agradable. Esperaba poder llevarse con ella más con el tiempo; cuando el turno de Layla llego, Sora presintió que probablemente seria la última vez que hablaría con ella. Pero no había sido así, mientras Sora se acercaba al modulo con la Sra. que la atendería Layla le había dado una hoja con sus datos y le había asegurándo que se verían mas seguido.

“¿Su nombre por favor?”

“Sora Naegino”

-…-

Había ya dado más de seis vueltas al campus y aun no terminaba de maravillarse ante todo lo que veía. A momentos se sentía un poco tonta pero sabia que en cuestión de días aquella emoción se iría, así que la disfrutaría mientras durase.

Mientras caminaba fuera de uno de los edificios del lugar y decidía que era tiempo de retirarse vio que un taxi se detenía a no muchos metros de ella, curiosa admiro desde lejos como una cabellera rubia salía de este y al mirar el rostro de aquella persona su respiración se detuvo.

“¿Ken?”

Sintió que su corazón se aceleraba al mirarlo agacharse en la ventanilla del taxi y cerro sus ojos con fuerza intentando alejar esa imagen de sus ojos.

No, no y no. Ken no podía ni debía estar ahí, él le había dicho que se iba muy lejos, tal vez estaría en Chicago. Si, en Chicago. Según le comento Layla mientras esperaban en la fila era mejor el plan de estudios de Contaduría y eso era lo que él iba a estudiar, sacudió su cabeza intentando eliminar esa imagen de él frente a ella.

Pero al volver a abrir sus ojos volvió a ver a Ken caminando distraídamente hacia su misma dirección y cuando sus miradas se cruzaron el corazón se le detuvo. Ahora no tenía escapatoria. En menos de lo que canta un gallo Ken se encontraba frente a ella y sonreía de oreja a oreja.

Y si tú notas que he cambiado, ahora no es casualidad
No soy la misma, me cuesta confesar
Es que hace tiempo que ya no te veo igual, me empiezo a enamorar

“No esperaba encontrarte aquí”

Sin contestar nada le miro a los ojos y se sintió desfallecer, ¿Por qué tenia ese efecto en ella?.

“Lo siento, pensé que después de aquella pequeña charla de despedida en tu casa las cosas habrían cambiado. Pero ahora veo que no es así, siento molestarte Sora. Nos vemos”

Lo vio caminar son soltura rumbo al edificio y se reprocho mentalmente aquella forma de actuar, se había prometido a si misma cambiar su historia ahora que se encontraba lejos de casa y sobre todo se había prometido a si misma no cometer los mismos tontos errores del pasado y aunque confiar en Ken sonaba a un error, el dejarlo partir sin antes hablar realmente también era una verdadero error.

Antes te tuve a mi lado como el amigo siempre fiel
Y ahora que no estas aquí llame para decirte por teléfono:
Te necesito aquí...

“Aun no te vayas Ken, creo que no hemos terminado de hablar. No aun”

Él enfoco su cristalina mirada en Sora y sonrió una vez más.

“¿Quieres tomar un café?. Creo que mi registro podría esperar solo un día mas”

Sora rió animada al oírlo decir eso y lo invito a tomar el café a su departamento, después de todo quedaba a muy pocas cuadras. Sin titubear Ken acepto y después de unos minutos se encontraban los dos en la sala de Sora tomando una humeante taza de café.

“Y bien, ¿Cómo llegaste hasta acá?” pregunto Ken curioso.

Sora sabia que debía ser sincera si quería iniciar bien aquel nuevo capitulo de su vida, así que sin chistar le contó a Ken sus verdaderos motivos.

“Francamente al principio iba a estudiar mi carrera en nuestra universidad por que no sabia a donde ir, ni tampoco me importaba Ken. Pero después de aquel día en el campamento decidí que debía irme lo más lejos posible. El Profesor Connel me fue de mucha ayuda y me recomendó entrar aquí. En cuanto mire la locación decidí que aquí estudiaría. ¿Y tu?”

Ken tomo un gran sorbo de su café antes de contestar y se miro las manos con mucho detenimiento.

“Para serte sincero mis razones fueron las mismas, después de aquel día en el campamento y ver que durante los siguientes días me ignorabas de la peor forma posible decidí cambiarme de universidad, iba a estudiar a dos horas de casa para poder estar cerca. Pero sabía que si me quedaba así de cerca solo sufriría, así que consultando al Profesor Connel y después de revisar todas las universidades fuera del área que tuvieran la carrera me dio dos opciones. Una de ellas era Chicago, pero al final decidí que lo mejor seria venir hasta acá. No se por que, solo se que me decidí por venir aquí. Creo que el resto es historia”

“Parece ser que el Profesor se empeño en reunirnos, ¿no crees?”

Ya no puedo estar sin ti, me vuelvo loca
A ciegas sin pensar, te deje marchar
Y si tu quieres, si lo quieres lo podemos intentar
Si pruebas una vez te puedo enamorar

El comentario de Sora hizo reír a Ken y después el silencio reino. Era incomodo, especialmente para Sora que deseaba poder hablar de todo lo sucedido, solo que no sabia como empezar.

“Yo—“

Ambos rieron al darse cuenta de que intentaban hablar al mismo tiempo y tras una breve discusión Ken cedió la palabra a Sora.

“Ken, en verdad lo siento. Eh sido muy tonta al no querer escucharte, incluso aquel día en mi casa evite el tema aunque sabía que seria probablemente la última vez que te vería. Espero que me perdones, pero sobre todo que entiendas que me sentía y aun siento herida, ustedes fueron y son mis mejores amigos y el solo hecho de saber que habían jugado conmigo me dolió mucho”

Al mirar la expresión de reproche en los ojos de Ken se detuvo y al no encontrar respuesta alguna continúo.

“Mia me explico su versión. Pero me gustaría escuchar la tuya Ken”

Nunca vi cuanto me amabas, no nunca te supe valorar
Ahora es mi turno, de luchar por ti
Regresa de una vez te necesito aquí

Esperaba encontrarse con que Ken decidiría mandarla a freír espárragos pero no tardo mucho en responder a su petición.

“Todo lo que te dije en el campamento es la verdad Sora, lo de Mia y yo fue un malentendido. Pero solo al principio, estaba tan dolido y preocupado por perderte que cuando Mia me propuso ahora si en realidad fingir que éramos algo no lo dude. No te imaginas el remordimiento que tenia todas las noches, pero el verte siempre con Oswald me hacia mas terco y mas empeñado en que el plan funcionase”

Hizo una pequeña pausa en la cual tomo otro gran sorbo de café antes de continuar.

“Aquella noche, en la fiesta de graduación Mia y yo decidimos que no valía la pena seguir más tiempo con ese juego. Por eso mismo te fui a buscar, quería contarte todo de una vez y finalmente quitarme ese peso de encima y sobre todo si te iba a perder, quería saberlo ya por que la incertidumbre me mataba. Sin embargo no tuve el valor, no lo tuve hasta que en el campamento un amigo me aconsejo que lo mejor seria usar la sinceridad. Yo también lo siento Sora y aunque se que jamás me perdonaras quiero que sepas que mis sentimientos no han cambiado. Y que si estas dispuesta… lo intentaría otra vez”

Para cuando Ken había terminado Sora sentía que su corazón explotaría, pero no estaba segura de que hacer o que pensar. Si le daba una oportunidad mas traicionaría aquel dolor que estaba latente, por que aun le dolía lo sucedido. Pero si no lo aceptaba temía perderle… o aun peor, perder su amistad.

Ya no puedo estar sin ti, me vuelvo loca
A ciegas sin pensar, te deje marchar
Y si tu quieres, si lo quieres lo podemos intentar
Si pruebas una vez te puedo enamorar

Sin embargo, no tuvo mucho tiempo para pensar por que de pronto sintió los tibios labios de Ken sobre los suyos y se sintió desfallecer. Eran suaves al contacto con los suyos y la forma en que se movían sobre los de ella era totalmente suave y tierna. No tardo mucho en corresponder a aquel beso que con el paso de los minutos se volvió mas acalorado. Cuando el aire les faltaba ambos se separaron y sin dejar de contemplarla Ken musito acariciando sus mejillas.

“No te imaginas cuantas veces imagine esto Sora, pero jamás pensé que seria tan maravilloso. Te amo”

La abrazo con fuerza y necesidad mientras lo oía sollozar sobre su hombro. Nunca antes lo había visto de esa manera, tan vulnerable…. y su corazón sintió la congoja al verlo sufrir.

De ninguna manera merecía su desprecio por que no sentía algo como eso por él, pero tampoco podía aceptar tan pronto una relación con él. Aun no se sentía segura. Acariciando con ternura su cabello le dijo palabras reconfortantes hasta que limpiándose las lagrimas un apenado Ken se puso de pie.

“Lo siento, creo que debería irme”

Sin ti me vuelvo loca
A ciegas sin pensar, te deje marchar
Y si tu quieres, si lo quieres lo podemos intentar
Si pruebas una vez te puedo enamorar

Sin decir una sola palabra lo observo caminar hacia la puerta y justo antes de salir le tomo la mano deteniéndolo antes de abrir el picaporte.

“No te puedes ir aun Ken, no me has dejado decirte lo que yo siento. Ken, solo necesito tiempo, por que la sensación que un solo beso tuyo causa en mi es mayor que la que cualquier cosa otra jamás ha causado en mi y se que a eso se le llama amor”

Observo como Ken esbozaba una sonrisa de oreja a oreja y después la tomo entre sus brazos con fuerza.

“No te preocupes Sora, te prometo que esperare y cuando estés lista serás la chica mas feliz en toda Carolina del Norte… y del mundo”

Bajándola poco después y sin permitirle decir algo mas la beso rápido en los labios antes de salir por la puerta. Sora mientras tanto, se toco los labios contenta y sonrió al momento en que oía a Ken desde abajo gritar con alegría.

Se sentía diferente, nueva y renovada. Pero sobre todo, sentía que a partir de ese momento su vida tomaría un rumbo que hacia mucho tiempo la esperaba. Solo era cuestión de tiempo.

Y tiempo a ambos les sobraba.

Te puedo enamorar

Ha-Ash – Si Pruebas una Vez

FIN

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